lunes, 21 de marzo de 2011

REALIDAD O FICCIÓN?

Hoy en día ya no nos asustamos casi de nada. Estamos tan acostumbrados a las barbaries diarias que ven nuestros ojos y oyen nuestros oídos que estamos prácticamente inmunizados.
Televisión, prensa, cine, videojuegos... si no hay violencia en ellos no nos interesa.
¿Imaginas un programa informativo sin noticias sobre guerras, asesinatos, e incluso sin luchas verbales entre políticos? Y digo esto último porque no sólo hay violencia donde hay sangre. Existen muchas formas de hacer daño y el hombre las conoce todas. Y no conforme con ello siempre está dispuesto a inventar alguna nueva.
Siempre he oído aquello de que la realidad supera la ficción; y así es.
¿Has visto alguna de las películas de "Saw"? (Yo con la primera tuve suficiente para no ver ninguna más) Tremendas ¿verdad? Difíciles de creer fuera de las pantallas. Pues si te parecen exageradas investiga un poco sobre Josef Mengele, el "ángel de la muerte", por nombrar uno.
¿Por qué este tipo de "personas" tienen siquiera derecho a vivir cuando no deberían ni haber nacido? ¿Por qué Pinochet pudo gozar del privilegio de morir de anciano, junto a sus seres queridos y totalmente inmune después de todo lo que hizo? ¿Cree alguien que la imaginación del hombre podría hacer ficción de un tipo de persona como Pinochet o Mengele si no fuera por que ya tenemos la referencia de muchos otros?
Y podemos exagerar la maldad del personaje o personajes todo lo que queramos... no importa... siempre nos quedaremos cortos y si no, ya alguien se encargará de superarlo en la vida real.
Y es que la maldad humana no tiene límites y para los que no la entendemos es muy difícil convivir con ella, por cierto. Evidentemente la mayoría no tenemos la mala suerte de encontrarnos con demonios como estos pero, aunque a menor escala e incluso sin siquiera rozarte, siempre habrá algún hijo de p... dispuesto a hacerte daño.
Uno de tantos ejemplos que confirma esto último ocurrió en España el 18 de Julio de 1936:
Ciudades, barrios e incluso familias que siempre habían convivido medianamente en paz, dentro de lo que cabe, iban a presentar un profundo cambio al estallar la Guerra Civil.
En poco tiempo, comienzan a aforar odios donde antes había saludos, besos o palmadas en la espalda. Odios que les lleva, en muchos de los casos, a matarse entre ellos o señalarse con el dedo para que sean otros los que aprieten el gatillo.
 ¿Qué ocurrió? ¿El demonio los poseyó de repente? Pienso que más bien esos sentimientos ya existían, en mucha menor intensidad, claro está, pero lo que es seguro es que no surgieron de la nada.
Sólo hizo falta una chispa para que todo explotara; unido a otros factores como el miedo y el ánimo de supervivencia, por supuesto, pero el caso es que ya existía la mecha.
Si alguien piensa que algo así no podría ocurrir ahora, se equivoca, estoy seguro de ello.
Y es que es así. Podemos escribir novelas, guiones para películas, crear videojuegos... todos repletos de maldad. Pero por mucha que haya siempre será poca comparada con la realidad y estamos tan acostumbrados a esta maldad que todos solemos cometer el mismo error: cuando vemos en televisión alguna noticia como la de "el monstruo de Amstetten", Josef Fritzl, que retuvo y violó a su propia hija durante 24 años (de los 18 a los 42 años) y tuvo 7 hijos con ella, 3 de los cuales mantuvo encerrados bajo tierra junto a su madre, etc etc... Cuando vemos u oimos algo así pensamos: "Dios mío, si parece una película de terror".  Tremendo error. LA REALIDAD SIEMPRE SUPERA LA FICCIÓN.